Alimento a fondo es una sección donde profundizaremos sobre un alimento en concreto. Hablaré de sus orígenes, sus propiedades, sus variedades, así como de diferentes recetas que se pueden hacer con él. Hoy hablaremos del mejillón!
MEJILLÓN
El mejillón es un molusco de carne sabrosa. Es el marisco más consumido, tanto fresco, congelado o en conserva. Es un alimento muy apreciado y utilizado en la cocina de todo el mundo. A pesar de ello, el mejillón se considera un alimento de menor calidad en la cocina que otros moluscos, como las ostras o las almejas. Tiene un precio muy económico, es muy nutritivo y tiene un sabor muy rico. Los mejillones son moluscos que están a nuestra disposición todo el año. Normalmente, los mejillones que compramos proceden del cultivo, aunque también se puede encontrar el mejillón salvaje en ciertas zonas costeras.
Los mejillones están compuestos en su mayoría por agua, por lo que tienen bajo contenido en grasas y calorías (contiene una media de 67 calorías por cada 100 gramos). Como es un alimento ligero, se suele recomendar en dietas de adelgazamiento y control de peso.
En su composición nutricional, destaca su gran cantidad de proteínas (10,8g por 100g de mejillón). Como es un producto procedente del mar, el mejillón también contiene muchos minerales, muy necesarios para nuestro organismo. Tienen un alto contenido el yodo (que nos ayuda al buen funcionamiento del metabolismo, regula nuestro colesterol, y fortalece cabello, piel y uñas), calcio, sodio, fósforo y magnesio. Además contiene una gran cantidad de hierro, mucho más que muchas carnes que se consideran ricas en hierro (el mejillón contiene 4,5g de hierro por cada 100).
Los mejillones, junto con las almejas y los berberechos, contienen más cantidad de hierro que cualquier otro alimento (exceptuando algunas algas). Este hierro es de origen animal y por eso nuestro organismo lo asimila mucho mejor que el procedente de alimentos vegetales. Los mejillones al vapor con un chorrito de zumo de limón y perejil combinan el hierro y la vitamina C que necesitas para absorber este mineral mejor, es una buena forma de prevenir la anemia.
A parte de minerales, los mejillones también aportan altas dosis de vitamina E (para mantener los tejidos corporales en perfectas condiciones) y grupo de vitaminas B (sobretodo B12, beneficioso para mujeres embarazadas o bebés en estado de lactancia). Por tanto, el mejillón es un alimento muy beneficioso para nuestro organismo y bajo en grasas, aunque hay que exceptuar a las personas alérgicas a los moluscos.
Se trata de un plato barato, muy fácil de preparar y que está disponible durante todo el año. Es importante consumirlo fresco. Al comprarlos, hay que mirar que estén bien cerrados, un signo inequívoco de que están vivos. También es importante mirar el tamaño: conviene comprarlos todos de igual tamaño para que la cocción resulte uniforme. Hay que tener en cuenta que no puede permanecer más de un día en el frigorífico, y si queremos conservarlos durante más tiempo, primero debemos abrirlos al vapor o en agua hirviendo y luego podremos guardarlos con el líquido de la cocción para que no queden secos.
Los mejillones se deben limpiar bien. Hay que raspar las conchas con un cuchillo y arrancar las barbas que sobresalgan. No hace falta un remojo previo, ya que no contienen arena, pero sí es recomendable un pase rápido por agua fría. Cuando estén limpios, sólo falta abrirlos al vapor o en agua hirviendo.
Existen muchas formas de consumir este alimento. En España se suelen consumir al vapor, sobretodo en Valencia y Galicia. Se suele servir acompañado de alguna salsa (mayonesa, vinagreta). Mejillones al vapor con limón, en escabeche, con tomate o como ingrediente en ensaladas y otros platos. El mejillón es un alimento muy versátil, se puede servir como aperitivo o como plato principal. Puede utilizarse para dar sabor a sopas y arroces.
La receta más típica es la de mejillones al vapor. Se suele servir acompañado de alguna salsa (mayonesa, vinagreta) o únicamente con limón, sal y pimienta. También es muy común la receta de mejillones a la marinera, que son mejillones al vapor con una salsa hecha con cebolla, tomate, ajo, aceite, laurel y vino.
Como aperitivo, existe una rica receta de mejillones en salsa de tomate. Se cuecen los mejillones en agua y se realiza un sofrito con cebolla, harina, tomate y caldo de los mejillones.
También se suelen cocinar los “mejillones tigres”, donde la concha vacía y limpia del mejillón se usa de recipiente para colocar una bechamel hecha con carne de mejillón, gambas y trozos de pescado, que se reboza en huevo y pan rallado y se fríe en la misma concha.
Se suelen poner mucho en paellas, cazuelas de marisco, arroces, pastas, de acompañamiento en platos de pescado (besugo, bacalao...), de relleno de albóndigas y croquetas.
Saludos!